Huile Divine, Aceite Divino | Caudalie

Iba a titular esta entrada de otra manera. Algo así como "cosas que llevarte de viaje" o "cosas que NO me llevé de viaje y lamenté luego".

Hay productos multifunción, o eso dicen las marcas, y luego están esos productos que son multifunción realmente y que interesa tener en el tocador por lo que pueda pasar.

Todo esto viene a que en un viaje no caí en llevarme el Aceite Divino de Caudalie. Creedme, lo necesitáis.

Empiezo contando que soy fan de la marca, de su filosofía y de gran parte de sus productos. Me gusta que trabajen sin parabenos, ftalatos, aceites minerales, etc. Me gusta que aprovechen lo mejor de la uva como antioxidante natural y lo metan en un bote. Me encanta la tolerancia de mi piel a lo que hacen.

Así que me tenía que gustar el producto estrella de la firma. Se trata de un aceite ligero con una fragancia floral amaderada, deliciosa, indescriptible.

Está formulado con aceite de argán, uva, hibisco y sésamo e incluye la patente de polifenoles (antioxidantes de la uva) de la firma.

Está indicado para todo tipo de pieles. Pero os cuento para lo que sirve y cómo lo uso:

• Cuerpo: aceite corporal aplicado con un suave masaje. Deja una fragancia embriagadora, la piel tersa, elástica e hidratada. Es un efecto que dura mucho, si se es constante, se notan beneficios en la piel a medio plazo.

• Rostro: como complemento del tratamiento facial (para pieles secas) añadiendo dos gotas a la crema hidratante.

• Mascarilla facial: por la noche, con la piel limpia, aplicando una pulverización sobre el rostro. Amaneces con la piel perfecta (ojo, como mascarilla flash no produce ese efecto, tarda en verse).

• Mascarilla capilar: aplicada antes del lavado.

• Sérum de puntas: es de los usos que menos me convence porque me apelmaza el cabello. Sin embargo, reconozco que para cabellos castigados puede ir bien.

¿Le vais a dar todos esos usos al aceite? Posiblemente no, y es porque en casa ya tenemos normalmente otros productos específicos al respecto: sérums para el cabello, mascarillas, etc.

Sin embargo, cuando vamos de viaje no podemos llevarnos ese "neceser deseado", entre otras cosas para ahorrar espacio en la maleta, así que un producto así es un multiuso fantástico cuando estamos fuera.

Hay que pensar también que cuando viajamos cambiamos nuestras rutinas: menos horas de sueño y de peor calidad, alimentación (menos vitaminas y frutas, por lo general) y cambio en el agua (afecta a la piel resecándola). También el clima afecta: a veces viajamos a climas diferentes al nuestro (mucha o poca humedad), exposición al sol (viajes con estancia en zona de playa, etc.).

De hecho, en el último viaje que realicé a Londres eché de menos este producto en mi neceser. Los jabones y body milk de baño de los amenities a veces se quedan cortos en hidratación o resecan. 

En Londres el clima es muy cambiante y el agua es muy dura. De repente hace un sol primaveral que llueve y parece invierno. Con la humedad se te encrespa el pelo y con el trastorno del viaje, las comidas, el agua de la ducha y los geles acabas con la piel hecha un desastre. El Aceite Divino me habría venido genial como loción tras la ducha, sérum para el cabello y tratamiento de choque facial tras el desmaquillado.

En el próximo viaje no me va a faltar.

¿Lo conocéis?
Do you know it?

Emeconeme

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